Con gran alegría presentamos la muestra de Monseñor Jorge Medina en sala Iglesia Museo Colchagua.

Fiel custodio y consejero del Vaticano es el cardenal chileno que ha estado mas cerca del Papa Benedicto XVI y el Papa Juan Pablo II. La muestra se encuentra en la Sala Iglesia del Museo Colchagua.

Cada uno de los objetos que se presentan en esta vitrina pertenecieron al Cardenal Jorge Medina Estévez quien determinó en vida que se exhibieran en el Museo Colchagua, lugar que apreciaba con extraordinario afecto. La Fundación Cardoen agradece a su familia, quienes cumpliendo su voluntad donaron sus objetos para alegría de los visitantes al Museo quienes podrán conocer la vida y el legado de quien fue uno de los siete cardenales que ha tenido nuestro país y el único que ejerció como miembro de la Curia Romana en la Santa Sede del Vaticano, lo que le permitió estar en contacto directo con Su Santidad El Papa.

El Cardenal Medina era doctor en Teología y Derecho Canónico. Fue obispo de Rancagua y de Valparaíso. Recibió del papa san Juan Pablo II el nombramiento de prefecto de la Congregación del Culto Divino y la Doctrina de los Sacramentos en Agosto de 1996. En su condición de Cardenal Protodiácono del Colegio Cardenalicio le correspondió anunciar al mundo el 19 de abril de 2005 que Joseph Ratzinger había sido elegido como papa con el nombre de Benedicto XVI. Por primera vez, un cardenal chileno se dirigía, en cinco idiomas, en la Plaza de San Pedro a miles de personas y millones que lo hacían por la televisión y radio. Saliendo al balcón principal de la Basílica de san Pedro, el cardenal Medina anunció a Su Santidad Benedicto XVI, saludando a los fieles: 

“Fratelli e sorelle carissimi. Annuntio vobis gaudium magnum Habemus Papam “

Tras haber cumplido 80 años de edad límite para votar en un cónclave, el cardenal Medina regresó a Chile, donde continuó escribiendo libros, artículos y publicaciones sobre temas de teología y doctrina católica, además de dictar charlas, conferencias y cursos. Falleció a los 94 años siendo sepultado en la cripta arzobispal de la Catedral Metropolitana de Santiago.

Dentro de los objetos que se pueden apreciar en el Museo Colchagua destacan su anillo episcopal, fotografías de Monseñor junto al santo Padre, vestimentas litúrgicas tales como capelo cardenalicio y sotana.